La disrupción del Covid-19 en nuestras vidas ha impactado no solo sobre la sanidad y la economía, sino también sobre la manera en la que nos relacionamos y trabajamos. Estamos ante una crisis de consumo, que viene generada por una crisis de confianza. Al contrario que en el 2008, donde nos enfrentábamos a una crisis de liquidez en los mercados, en estos momentos la liquidez no parece ser un problema. Esta crisis nos ha llevado a afrontar nuevos retos y ha puesto de manifiesto la necesidad de buscar e implantar nuevos modelos de negocio, apoyado por soluciones tecnológicas para garantizar su buen funcionamiento.

La innovación y la tecnología han resultado ser las grandes aliadas frente a los retos que esta crisis ha supuesto, retos que van desde el trabajo en remoto, la comunicación, la eficiencia y, sobre todo, la seguridad entre otros y la generación de confianza.

Pero ¿Qué es la Transformación Digital?

La Transformación Digital, no es solo la integración de la tecnología en los procesos empresariales para mejorar su eficiencia, sino que supone la reinvención de las compañías y sus modelos de negocio, cambios en sus métodos de trabajo, estrategias y un cambio cultural dentro de las mismas. Cambios que empiezan por el equipo humano como el gran protagonista y motor principal de la transformación global que estamos viviendo.

¿Qué cambios implica la Transformación Digital?

Antes de comenzar con el cambio en la organización se realiza una evaluación de 360 grados con una consultoría donde se localizan y analizan todos los procesos de una compañía y cada una de las tareas que realiza cada una de las personas. Nuestra metodología se basa en “El impacto en toda la organización como algo que no se puede ignorar y que hay que abordar desde el primer momento”. La necesidad de adaptación al contexto se impone para todo tipo de empresas, requiriendo un tipo de transformación/actualización digital, específico para cada una de ellas, pero con objetivos comunes en general.

Se pueden requerir cambios en la forma en que trabajan los empleados, en las herramientas que se utilizan, los tipos de productos y servicios que se producen, la forma en que se venden y entregan -logística y experiencia de compra-, etc. Todos estos eslabones del negocio deben de estar interconectados y actualizados a las tendencias del mercado actual para:

– Automatizar la mayor parte de los procesos.

– Minimizar costes y evitar gastos superfluos. 

– Maximizar eficacia y eficiencia.

Con el objetivo de mejorar el rendimiento y obtener mejores resultados hacia el nuevo paradigma digital, se da lugar a la actualización de la organización y la necesidad de que recursos humanos gestione el cambio en sus trabajadores, núcleo en toda transformación digital.

El esfuerzo de transformación depende del grado de madurez digital de cada empresa y su sector. Las iniciativas digitales requieren movimientos rápidos, hay que estar a la altura de los tiempos que corren.

Alberto Sánchez García

Director General de NETCheck

Más información:

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