La ley de memoria histórica que salió publicada en el 2007 y cerró en 2009 conocida como Ley de Nietos otorgó la ciudadanía a descendientes de españoles de origen que vivieron en el extranjero por motivos de exilio. Pero sólo hasta el segundo grado de consanguinidad, sin tener que residir en España, para tener el derecho al pasaporte español.

Dicha Ley estuvo vigente durante pocos años y no todos los individuos pudieron acceder a ella. Quedaron excluidos:

• Nietos y nietas de españolas de origen nacidas en España y casadas con un extranjero antes de la constitución española del 78;
• Hijos mayores de edad de estos españoles que se beneficiaron de la ley;
• Descendientes de quienes emigraron a otro país y adquirieron la nacionalidad del país de acogida, perdiendo la española;
• Y descendientes de los que perdieron la nacionalidad por no notificar el deseo de conservarla, después de cumplir la mayoría de edad.

Para dar solución a estas desigualdades, se ha hecho una propuesta de ley que está siendo estudiada por el parlamento español y que permitirá adquirir la nacionalidad a aquellos que no pudieron beneficiarse de la antigua Ley de Nietos. Se prevé nuevamente una reforma a la Ley y si eres nieto/nieta de un español de origen que no pudo aprovechar la nacionalidad española, tendrás una nueva oportunidad.